domingo, 8 de enero de 2012

Esto no tiene sentido

Estoy llena de tantas cosas que quisiera decir. Es como un vomito de temáticas, solo mi mamá soporta escucharlas todas -o casi todas- ir y venir incesantes, una tras otra, sin una pizca de sentido ni cohesión. Todas llegan, con las palabras justas, pero no las puedo evitar, para mi tienen toda la coherencia, tal vez mi mamá solo me escucha y yo soy la única que me entiendo.

Últimamente me he percatado del peso que tiene dejar pasar los días y como se van acumulando, uno tras otro, hasta que forman años y pasan... ¡raudos! sin piedad. Me siento afortunada de recordar cada año con una sensación especial y única, eso es algo que no quiero perder de mi. Es obvio que a veces, lamentablemente, pasan días en que nada es productivo, los avances son muy pocos, pero por lo menos nunca he vivido un año en vano. Recuerdo cuando era una niña... una niñita, veía sailor moon acostada en el sillón, mientras tomaba mamadera, una acción tan simple, que hasta el día de hoy el solo hecho de recordarla me hace sentir plenamente feliz.

Recuerdo el año nuevo, cuando terminó el 2008 y empezó el 2009, ese nudo en la garganta regresa a mi, otra vez, como cada vez que lo recuerdo, el último minuto del 2008, de pie atrás de la puerta de entrada a mi casa, con las rodillas juntas y las piernas levemente flectadas, las manos juntas apretándome el corazón, como para contenerlo y los ojos cerrados, apretados... despidiéndome mentalmente y en silencio de cada hecho, con unas ansias intensas de que ese minuto fuera eterno, rogando porque se detuviera esa cuenta regresiva, sabía que si se acababa el año, inevitablemente iba a comenzar -con esa racionalidad que no sé de donde saco- a cerrar el ciclo, yo no quería, pero debía. No recuerdo otro año nuevo en el que estuviera tan acongojada... y ese alivio con rabia que sentí cuando se escuchó el : "¡Feliz año nuevo!", entonces ya todo había terminado y me sentí como un vino añejo y nostálgico de cosas que hace un par de segundos atrás aún podía sentirlas como vigentes. Horrible, irrepetible y aún cierro los ojos en cada último minuto de cada año, como buscando atraer hacia mi esa sensación, otra vez, pero nunca me vuelve a resultar.

En el fondo no soy mala persona, no quiero hacerle daño, no quiero jugar con él, pero es que él siempre se las arregla para que yo termine siendo una vil desgraciada. Le tengo cariño, pero no es nada comparado con lo que él siente por mi, lo mío es una mínima muestra de gratitud hacia sus nobles sentimientos. Definitivamente, él no se merece querer tanto y que lo quieran tan poco, pero tampoco se merece -ni yo merezco- darme el lujo de romper su corazón tan profundamente otra vez. De cualquier forma le hago daño, eso es algo que no me puedo permitir, ni perdonar. Lo peor es que alcanzo a percatarme como una parte de mi, deseaba esto y lo disfruta.

Y tú? tú si que me vuelves loca, trato de conservar la compostura, pero por dentro estoy revoloteando como una niña, por tu culpa. Siento celos, de tu pasado, de tu tiempo, de tu caballerosidad con otras, de tu amistad con otras... quisiera tenerte solo para mi, y ni siquiera sé qué está pasando por tu cabeza ahora. A veces pienso que es una pérdida de tiempo, que de aquí a marzo se me va a pasar. A veces pienso que lo arruiné. Me mentalizo para al momento de verte tratarte como solo uno más, como antes; pero es inevitable, no puedo dejar de buscar tu mirada, mi cuerpo de forma inconsciente se mueve veloz hacia ti cuando estás cerca, con la mirada te busco cuando vas a venir. Deseo tenerte cerca, pero trato de evitar todo contacto físico contigo y a la vez adoro esa sensación que me producen tus abrazos, cuando tus manos encuentran siempre la posición perfecta en mi espalda y mi rostro en tu cuello, sentir cuando hueles mi pelo. Seguirte con la mirada cada vez que te mueves es otra de las costumbres que he adquirido últimamente, es inevitable sentir que lo arruiné, por no decir nada, por no saber que piensas tú, lo arruiné porque quizás ya es muy tarde, tal ves te enojes, y no quiero estar lejos de ti. Sé que es lo que pasa conmigo y me gusta, pero no.

1 comentario:

  1. Ve y dile que está pasando, tienes 19, no 80, so, no, nada está perdido y si todo sale mal, no sabes como son las vueltas de la vida.


    No juegues con el otro buen hombre, que para eso tenemos cabeza y funciones psíquicas, para eso podemos dejar los instintos y pasiones. A no ser que el gallo no se vea pasado a llevar, entonces no toque al susodicho xD


    It's that simple. ojalá leas esto

    te quiero.

    ResponderEliminar